Con motivo del décimo aniversario, la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles, AMDA, celebra la exposición “Historia de la distribución del automóvil en Madrid”, del 15 al 20 de noviembre en el Palacio de Cristal de Arganzuela, poniendo en valor el pasado, el presente y el futuro de los concesionarios de la comunidad.
Miles de vehículos eléctricos, a combustión, de pedales o mediante cualquier tipo de tracción llenan las calles de Madrid cada día. Una movilidad digitalizada y avanzada que refleja diez años de trabajo de AMDA, la Asociación Madrileña de Distribuidores de Automóviles.
En este décimo aniversario, la asociación quiere recordar su labor de utilidad en la interlocución de los concesionarios de la Comunidad de Madrid con las administraciones públicas. Tomando como referencia estos años de dedicación en el sector de la automoción, AMDA presenta la exposición “Historia de la distribución del automóvil en Madrid” del 14 al 20 de noviembre en el Palacio de Cristal de Arganzuela, a excepción del día 18 que permanecerá cerrada.
Se trata de un recorrido histórico donde el visitante elige por dónde empezar. No hay un hilo narrativo, ya que las piezas en exposición irán acompañadas de una pequeña biografía con los datos más característicos y curiosos de cada modelo.
En esta exposición, AMDA hace un repaso del automóvil desde los vehículos a motor típicos de los sesenta hasta los coches de última generación impulsados por hidrógeno que empiezan a formar parte de las calles de la capital. El objetivo es poner en valor el pasado, el presente y el futuro de los concesionarios de Madrid, entendiendo a los concesionarios como parte activa de la movilidad de la ciudad “que han trabajado para compartir, no solo la innovación o la seguridad, sino también sus ganas para participar activamente en la sociedad”, subrayan desde AMDA.
¿Qué encontraremos en la exposición?
Estructurada en cuatro áreas principales, aborda vehículos del presente y el futuro dando lugar a la movilidad eléctrica. En estos días el visitante podrá entender cómo el 600, que fue tan demandado en los sesenta, ha evolucionado hasta nuestros días en el Fiat 500; las características principales del que fue por excelencia el conocido tiburón, Citroen DS/ID, o el más lujoso y deseado de la época, el Rolls Royce Phantom III.
Aludiendo a la movilidad, como eje principal de esta exposición, se ha dedicado un espacio a la movilidad de la Guardia Civil y de la Policía Municipal. Una zona cubierta con dos coches y motos tradicionales como símbolo de la evolución y adaptación de los cuerpos de seguridad a los tiempos y necesidades de cada momento. Los visitantes tendrán la oportunidad de ver de cerca algunos de los alcoholímetros y radares que han velado por la seguridad de la Comunidad en los últimos años.
La movilidad eléctrica empieza a estar latente en la sociedad y por ello, en estos días la asociación madrileña mostrará cómo es un coche por dentro a través de un Nissan eléctrico o una bicicleta Porsche. Desde AMDA consideran que el futuro es el presente más próximo y como colofón, la exposición contará con un modelo de hidrógeno y un coche de reparto autónomo.
El plano de la ruta no acaba aquí. A lo largo del recorrido se han colocado vitrinas que muestran a modo expositor gran variedad de revistas, catálogos de uso de los coches más tradicionales y llamativos, miniaturas, imágenes de la antigua Madrid, campañas de tráfico y maniquíes de guardias urbanos. Una forma de poner en valor la importancia de la movilidad madrileña a través de los concesionarios de la capital.
La exposición estará abierta del 15 al 20 de noviembre en el invernadero del Palacio de Cristal de Arganzuela con entrada libre, en horario de 10 a 14.00h.