El informe de Grupo de Opinión y Reflexión en Economía Política EuropeG refleja las trabas de la industria para la electrificación.
La hegemonía de China sobre la industria de la automoción es indiscutible con vehículos que son competitivos frente a los europeos en una de las cuestiones que los consumidores valoran, el precio. En un momento en el que Europa ha apostado por la electrificación de los vehículos, con el fin de evitar la dependencia exterior hacia el petróleo y, especialmente, reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, principales causantes del cambio climático, que desde hace años afecta al medio ambiente.
Un informe publicado por el Grupo de Opinión y Reflexión en Economía Política EuropeG refleja las trabas que tiene que afrontar la industria en su camino hacia la electrificación, por lo que consideran una serie de medidas que permitan hacer realidad los objetivos planteados por la Unión Europea, que marcarán un antes y un después en la movilidad de nuestros países.
Necesidad de reformas y nuevas estrategias
Basado en el Informe Draghi, en el que se abordan cuestiones relacionadas con la competitividad europea y que subraya la necesidad urgente de reformas y nuevas estrategias, está elaborado por el Catedrático de Economía Aplicada por la Universidad Complutense de Madrid, Rafael Myro; y el Catedrático de Organización de Empresas de la Universidad de Zaragoza, Vicente Salas; en el que se aborda la adecuación de las medidas que se han puesto en marcha en la Unión Europea para la transición hacia el vehículo eléctrico, que apuntan debe basarse en otorgar incentivos en forma de ayudas a los compradores, incrementar el apoyo para la innovación de las factorías, al mismo tiempo que se debe mitigar el impacto que surgirá a nivel laboral y social.
Una de las principales trabas que afronta la industria es las diferencias existentes a nivel legislativo en cada país, que lleva a que los ritmos de implantación sean diferentes y es que, como ejemplo, en el caso de Países Bajos hay más de 857 puntos de recarga por cada 100.000 habitantes y una ratio del 39% de vehículos eléctricos; mientras que en España hay menos de 75 puntos y una tasa del 6 %. Razones, por las que los expertos esgrimen que no existe en Europa un incremento tan pronunciado como se esperaba, a los que se une la peor renta de las familias y el precio de estos automóviles que suponen un desembolso entre el 30 y el 50% mayor que los de motores de combustión.
La competencia china se ha acentuado en Europa, pasando del 1% en 2019 hasta el 55% de las exportaciones en 2023, con una penetración muy escasa en Estados Unidos del gigante asiático. Razón por la que los expertos consideran importante que se eviten los aranceles y llegar a pactos con China.
El Grupo de Opinión y Reflexión EuropeG considera positivo el nuevo “Plan de Acción Industrial para el sector de la automoción europeo” que se dio a conocer el pasado 5 de marzo por la Comisión Europea, en 2025 supondrá un relanzamiento gracias a la existencia de modelos más asequibles.
