El país planea establecer un total de 24.000 estaciones de intercambio en todo el país para 2025, frente a las 1.400 actuales.
Entre las barreras por superar que tiene la movilidad eléctrica destaca la falta de infraestructura. Para sobrepasar este escollo algunos países como China están apostado por otro métodos distintos al aumento de los puntos de recarga. El gran país asiático está impulsando con fuerza las baterías intercambiables para coches eléctricos. ¿Cuáles son sus verdaderos objetivos? Te los contamos.
Según informa Reuters, China está impulsando con fuerza este tipo de baterías como complemento de la carga regular de vehículos. De hecho, el Gobierno apoya a varias empresas que apuestan y desarrollan esta tecnología.
Distintas empresas fabricantes de China, junto con desarrolladores de baterías y otros actores del sector, estiman que para el año 2025 habrá 24.000 estaciones de intercambio en todo el país. En la actualidad, apenas hay 1.400.
Y, ¿cómo funcionan este tipo de baterías? El intercambio de baterías permite a los conductores reemplazar rápidamente los paquetes agotados por otros completamente cargados. Esto evita enchufar el vehículo en un punto de carga. El intercambio podría ayudar a mitigar una gran barrera para el sector aunque los especialistas advierten que esta tendencia solo puede despegar si las baterías se estandarizan en toda la industria.
Si China logra que esta opción sea cada vez más mayoritaria en el país asiático, modelos comerciales de marcas globales como Tesla, General Motors o Volkswagen podrían tener serios problemas. Estos vehículos están diseñados para disponer de una red de carga y no para intercambiar su batería.
Los planes de China
Esta tendencia, defendida por el gobierno chino, es parte del plan de Beijing para hacer que el 25% de las ventas de automóviles sean completamente eléctricas para 2025. Estas estimaciones podrían variar de forma positiva si las baterías intercambiables cuajan entre los usuarios.
Las baterías intercambiables, un proyecto para todo el mundo
Según ha afirmado para Reuters, CATL, el mayor fabricante de baterías del mundo, están ya desarrollando servicios de intercambio de baterías no solo para China, sino “para satisfacer la demanda de los mercados globales”.
“Estamos acumulando experiencia en el mercado chino y, al mismo tiempo, nos comunicamos estrechamente con socios en el extranjero. Pronto recibirán información más concreta”, explican.